¡Presentemos a Venus Yoruichi!

Venus. Conocida en todo el mundo como la diosa romana de la belleza y el amor, el planeta hermano de la Tierra y Sailor Senshi.

¡Y ahora, mi gatita! Nunca he sido realmente una amante de las mascotas, pero siempre he adorado a los gatos. Ahora que tengo Venus, he comenzado a sentirme más cómoda alrededor de los animales. ¡Y me ha sido bastante humilde!

La decisión de adoptarla fue espontánea. En uno de mis días de descanso, fui al Starbucks en el que trabajé para recoger mis propinas y comprar un café. Mi compañera de trabajo estaba allí, contándome que tenía que empezar a regalar sus gatos por razones personales y me preguntó si estaba dispuesta a adoptar a la última gatita. Expresé cierto interés porque, bueno, estaba super interesada. Pero al principio, tenía dudas acerca de comprometerme. No tuve ninguna experiencia cuidando un animal, ni estaba preparada para ahorrar dinero para hacerlo. Pero cuanto más oí acerca de Venus, más dispuesta estaba a adoptarla. ¡Simplemente sonaba perfecta!

La noche siguiente, conocí a Venus en persona y la traje a mi casa. Ella era un poco miedosa al principio, pero esa misma noche, comenzó a explorar cada esquina de mi apartamento, oliendo cualquier cosa que despertó su curiosidad. ¡Incluso cayó en el bote de basura cuando saltaba de la cubierta! En ese momento, sabía que nos llevaríamos bien.

He estado aprendiendo mucho acerca de Venus y de mí misma durante estos últimos cinco meses. Ella es tranquila, silenciosa, curiosa y aventurera. ¡Y hijole-- corre muy rápido! Le encanta la comida húmeda, su conejito rosa Georgi (gracias Christi!) y saludando a la gente en la puerta. Y he aprendido que aunque soy una persona hogareña y disfruto la sensación de estar sola, ha sido agradable tener una mascota a mi lado que duerme conmigo, me mira mientras cocino, me espera mientras me ducho y me escucha cantar fuera de tono en la mañana temprana y la noche. Estoy aprendiendo que es bonito no estar sola todo el tiempo y que puedo encontrar consuelo en los demás también - humano o no.

Definitivamente ha sido una curva de aprendizaje convirtiéndome de una hikikomori (o ermitaña) a cuidadora de mascotas, pero adoptando Venus ha sido una de las mejores decisiones que he tomado. Estoy muy emocionada de crecer con ella y ver dónde estaremos en los próximos dos, tres, cuatro años y más. ¿Tendré historias emocionantes sobre mi desarrollo con ACtS Unides para compartir con ella? ¿Ella desarrollará un apetito solo para los alimentos orgánicos húmedos? Sólo el tiempo lo dirá, así que mientras tanto voy a seguir trabajando duro para cumplir mi papel como directora de comunicaciones y seguir alimentándola con trozos de carne deliciosos!

“Qué regalo más grandioso que el amor de un gato.” - Charles Dickens